Aunque sea época vacacional y no seamos conscientes de lo que estos cambios externos e internos pueden ocasionar en nuestra piel, pueden dañar su barrera protectora y que ésta torne a más áspera, pierda flexibilidad, se vuelva frágil, parezca más opaca, presente descamación o incluso oxidación producida por los radicales libres (del sol), que son los responsables del envejecimiento de la piel, con la consecuente aparición de manchas nada deseadas…

Para evitar llegar a esta situación, hoy te dejamos una serie de recomendaciones y rutinas que te ayudarán a mantener una buena hidratación de la piel en verano.

Recomendaciones:

  • Cuida tu dieta. Procura mantener comidas saludables y equilibradas, rica en frutas y verduras, y beber un mínimo de 2 litros de agua al día.
  • Exfolia la piel de 2 a 3 veces en semana. Exfoliar la piel en verano, tanto del rostro como del cuerpo, es fundamental para eliminar células muertas y recuperar la firmeza de ésta. No perderás el bronceado, al revés, lo cuidarás y durará más.
  • Ten presente los activos antioxidantes. Ayudarán a compensar los daños oxidativos en las células de la piel y te aportarán propiedades calmantes y regeneradoras; elige caléndula, manzanilla, regaliz, bisabolol…
  • El descanso. Disfrutar de planes y exprimir el verano al máximo es genial, pero también es fundamental buscar ese descanso necesario para mantener el equilibrio, no sólo de la piel, sino de todo nuestro organismo.

Aplicar los cosméticos necesarios cada día, dentro de una rutina. Ingredientes naturales como los aceites vegetales: el aceite de germen de trigo, jojoba, oliva, girasol, avellana, onagra, argán, aguacate… Sus ácidos grasos poliinsaturados procurarán que se recupere la barrera lipídica de tu piel y evitarán la deshidratación. E ingredientes hidratantes como la glicerina, alfahidroxiácidos, urea, ácido hialurónico, añadidos a extractos vegetales de frutas como la granada, manzana, melón o kiwi, también aportarán humedad. Evitar ingredientes como la vaselina, siliconas y aceites minerales en la composición de tus cosméticos.

Rutina:

Te indicamos una rutina súper básica, que necesitarás aplicar para preservar la hidratación que buscas:

  1. Limpia la piel, en la mañana y en la noche, como primer paso imprescindible.
  2. Aplica un exfoliante 2-3 veces en semana, masajeando (contribuirá a la mejora de la circulación), y retira con agua tibia.
  3. Aplica un tónico para aportar hidratación y refrescar.
  4. Añade un sérum para aportar jugosidad.
  5. Hidrata tu piel con la crema que utilices.
  6. Las mascarillas faciales son muy beneficiosas. Puedes incluirla 1 vez en semana, tomándote el tiempo que requiere su correcta aplicación para aprovechar sus efectos. Te ayudará a limpiar los poros, hidratar, aportar un tono de piel uniforme, reducir el envejecimiento y asegurar una piel más firme.
  7. Utiliza siempre fotoprotectores de alta protección de calidad frente a las cuatro radiaciones (UVB, UVA, IR y visible). Imprescindible también tanto en verano como en cualquier estación.

En verano solemos tender a perder rutinas y los buenos hábitos pero te animamos a no hacerlo, ya que después, los daños pueden disgustarnos o la recuperación puede llevarnos más tiempo del imaginado para volver a ver nuestra piel como la habíamos conseguido tener.